Los
Primeros Nacidos o Quendi (los que hablan) fueron el pueblo que
Ilúvatar creó primero y cuya llegada exacta ocultó a los Valar. Muchos
de ellos tienen siglos de vida y por ello quizá puedan parecer
prejuiciosos a ojos de los mortales pues para muchos de ellos somos como
copos de nieve que duran apenas un instante. Se les considera la más
antigua y noble de las razas hablantes de la Tierra Media. En su
despertar vagaron solos por los bosques que poblaban el Mundo hasta que
fueron encontrados por Oromë, el Valar cazador. El les instruyó en la
recolección y la caza y les enseñó a utilizar su potente vista y su
ligera y ágil musculatura.
En este punto la raza de los Elfos se dividió por primera vez y
empezaron a diferir unos de otros, pues unos se fueron junto a Oromë a
Valinor, los Eldar (Pueblo de las estrellas), y algunos decidieron no partir o establecerse a mitad de camino.
Moriquendi (Elfos de la Oscuridad)
Los Avari (Renuentes) fueron la raza de elfos que se negaron a la propuesta de Oromë y se establecieron en Cuivenen o en el Gran Bosque Verde del Este. Lo
que fué exactamente de ellos no se sabe con totalidad salvo aquellos
que se establecieron en el Bosque Verde y se relacionaron con los que se
iban deteniendo durante la travesía, que descendieron a lo que hoy
conocemos como Elfos Silvanos o Elfos de los Bosques. El Reino del
Bosque de Thranduil es el mayor vestigio que queda de ellos.
Los
Elfos que se detubieron durante la travesia hacia Valinor y decirieron
establecerse junto a las costas de la Tierra Media fueron conocidos como
los Sindar. Aquellos que decidieron no continuar el vieje y establecerse junto a los bosques de la desembocadura del Anduin fueron conocidos como Nandor. Estos amaban más a las aguas y los mares de Ulmos que a los bosques de Yavanna. El Barquero Círdan, de los Puertos Grises es el líder actual de los Teleri de la Tierra Media y Señor de los Sindar. El Rey Thranduil y su hijo Légolas son en parte Sindar y en parte Avari. Los Elfos Nandor se mezclaron con la nobleza de la raza de los hombres de Gondor y desaparecieron en gran parte. El principe Imrahil de Dol Amroth desciende de esa unión. Gildor Inglorion, el elfo errante y gran parte de su grupo son de sangre Nandor.
Los Elfos que si vieron alguna vez la Luz de los Dos Árboles de
Valinor se consideran a si mismo los Calaquendi (Elfos de la Luz) en
contraposición con los Moriquendi (Elfos de la Oscuridad) que no
salieron a tiempo de la Tierra Media. Los descendientes de estos
reflejan la exposición a la Luz demostrando una sabiduria y dotes
creativas que desafían a las de los mismos Valar. Entre los
descendientes de estos Elfos hay tres grandes grupos:
Los Vanyar (los hermosos) o Minyar (los primeros) fueron el
primer clan de los elfos en partir y todos llegaron a Aman. Son la raza
de Arda más poderosa en la Luz y su habilidad arcana y dotes creativas
igualan a la de los Maiar con facilidad. Jamás volvieron a salir de Aman
hasta que se libró la batalla final contra Morgoth, en la que
resultaron de vital importancia.
Se desconoce si alguno de ellos permaneció en la Tierra Media.
Los Noldor (los profundos) son el segundo clan en partir y todos
llegaron a Aman. Fueron exiliados de Valinor tras la primera Matanza de
Elfos por Elfos en la Batalla de Aqualonde, en la que masacraron a los
Falmari que no les entregaron pacificamente sus barcos para pereguir a
Melkor, quien había matado a Fëanor, Rey de los Noldor y robado su mayor
tesoro, los Silmarills. Los Elfos Noldor eran los más dotados
intelectualmente de todos los
Elfos, así como los más fuertes y los de mayor orgullo. Los Noldor eran
el pueblo más valiente y poderoso entre los Hijos de Ilúvatar, con una
luz en los ojos similar a la de las estrellas. Ellos libraron
las guerras más grandes de las que hayan oído los enanos o los hombres,
por lo que son el pueblo más aguerrido de la Tierra Media.
Tras la
Batalla de la Última Alianza de Hombres y Elfos, en la que Sauron fué
temporalmente derrotado, su población es muy escasa y apenas hay
natalidad. Se refugian en Rivendell y en los Puertos Grises, junto a
Círdan de los Sindar.
Los Falmari (los del mar) fueron los últimos de los Eldar en
llegar a Aman y los únicos de los Teleri que lo hicieron. Eran famosos
por su afición musical y por su voz, así como por su arte en la
fabricación de embarcaciones y por su conocimiento del mar. No en vano
tenían gran amistad con Osse, el maia que gobierna las olas, quien les
enseñó las disciplinas de la navegación.
Tras
la batalla de Aqualonde renunciaron a librar guerras, fuera contra el
enemigo que fuera, y se dedicaron a perfeccionar las tecnicas arcanas
del mar. Cuando Númenor era prospero y fiel, fueron los Falmari de Tol
Ëressëa los que les enseñaron a navegar e instruyeron en lo referente a
Ilúvatar y los Valar y Maiar.
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